jueves, 28 de enero de 2021

Alain Resnais, "Noche y niebla" [1955]


"Los asesinatos en masa y la conversión de millones de personas en esclavos transcurrieron de acuerdo con un calendario y unas normas. Todo se ajustaba con precisión al cumplimiento de objetivos fijados en plazos trimestrales y mensuales. El transporte de millones de personas condenadas a muerte o a la esclavitud requería la correspondiente planificación de los transportes ferroviarios. La construcción de las cámaras de gas y los crematorios para la incineración de los cadáveres requirió la colaboración de químicos, expertos en termodinámica, ingenieros y especialistas en construcción. Todas esas instalaciones fueron construidas a partir de proyectos previamente elaborados, esos proyectos fueron discutidos y aprobados. La tecnología del exterminio en masa fue segmentada en una serie de funciones consecutivas, como si se tratara de un proceso industrial cualquiera. Las joyas y el dinero de los muertos se enviaban a las arcas del Estado; sus muebles, objetos personales, ropa y zapatos eran sometidos a un proceso de selección, se los almacenaba por separado y después eran redistribuidos. Las empresas agrícolas o militares y las fábricas de jabón hacían pedidos que eran satisfechos con prontitud. Así, recibían y distribuían cabello de mujer, grasa y huesos astillados provenientes de los cadáveres. No, decididamente, no fue una tormenta lo que se abatió sobre Europa. Fueron la teoría y la práctica del racismo. Un plan y su realización en la práctica. Un plano arquitectónico y el edificio erigido a partir de las líneas trazadas sobre el papel."

(Ilyá Ehrenburg y Vasili Grossman, "El libro negro", 1944-1946.)

miércoles, 27 de enero de 2021

Maria Augusta Ramos, "El Proceso" [2018]


La anatomía del proceso de destitución de la presidenta electa Dilma Rousseff por parte del senado brasileño por una presunta violación de la ley presupuestaria, aprovechando la coyuntura de la Operación Java Lato, la mayor investigación de corrupción política de la historia de Brasil. Un ejemplo de guerra jurídica que desembocó en lo que se consideró un pseudolegal golpe de Estado, una práctica 'lawfare' ya usada en países latinoamericanos como Honduras y Paraguay. El gran pretexto para hacer asumible socialmente la destitución fue 'el combate contra la corrupción', aun estando varios de los mismos diputados promotores del 'impeachement' investigados en la propia Operación Java Lato, como el mismo presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, impulsor clave del proceso, que sería posteriormente separado de su cargo acusado de tener ocultado en Suiza más de cinco millones de reales desviados de Petrobras.

domingo, 24 de enero de 2021

Eliza Capai, "Espero tu (re)vuelta" [2019]


Las vigorosas voces de tres chavales de clase baja nos guían por las victorias y las derrotas de los estudiantes de Sao Paulo en su lucha por la educación pública durante el último lustro del gobierno de Dilma Rousseff: del Movimiento Pase Libre contra la subida de precios del transporte público a la ocupación de los colegios en peligro de desmantelamiento por un decreto del gobernador paulino Geraldo Alckmin. Una historia viva que bascula entre el desenfado y la alegría de encontrarse en la batalla común y la gravedad y la tristeza de la represión policial, y cuya narración culmina en un punto alarmante: la víspera de la investidura del infame Jair Bolsonaro como presidente de Brasil.

viernes, 22 de enero de 2021

Alison Klayman, "Steve Bannon, el gran manipulador" [2019]


Un retrato de Steve K. Bannon, el célebre alborotador digital de la nueva extrema derecha elegido en agosto de 2016 como jefe de campaña de Trump, que hasta entonces dirigía el portal de noticias 'Breitbart News', el exitoso punto de encuentro de la alt-right estadounidense cocido entre bulos, titulares estridentes y fantasías conspirativas. ¿Temas destacados en 'Breitbart'?: la demonización de la inmigración, la maldad de los musulmanes, la obsesión por una supuesta oleada de crímenes de negros contra blancos, el temor blanco por la gran sustitución demográfica, la amenaza del feminismo rampante o la homofobia. El documental, flojo, no se engañen, acompaña Bannon por su aventura europea en la formación de El Movimiento, un organismo que busca la unificación-potenciación de las formaciones ultranacionalistas de los países europeos: UKIP, La Liga Norte, la Agrupación Nacional de Marine Le Pen, el belga Parti Populaire, el FIDESZ, los Demócratas de Suecia, VOX. ¿Y cuál es el concepto con el que Bannon intenta sortear todas las acusaciones ominosas que recibe? El nacionalismo económico. Con ingrata suficiencia se considera mimado por los vientos de la historia.

jueves, 21 de enero de 2021

Eszter Hajdú, "Hungría 2018" [2018]


Los migrantes son el gran enemigo. Los migrantes son quienes destrozan la cultura húngara. Hungría protege a toda Europa de los migrantes. Hungría protege al cristianismo de los migrantes y del islam. Hungría protege a las mujeres húngaras de los violadores migrantes. Víktor Orbán y el FIDESZ, el partido gobernante, son el brazo custodio de Dios en Hungría frente a la malvada triada diabólica, que es una y trina: George Soros, la Unión Europea y los migrantes. El documental sigue los meses previos a las últimas elecciones generales que se celebraron en Hungría, el 8 de abril del 2018, acompañando la campaña electoral de Ferenc Gyurcsány, exprimer ministro de la nación del 2004 al 2009 y candidato de la Coalición Democrática (DK). Viktor Orbán fue reelegido por cuarta vez consecutiva, manteniendo la mayoría absoluta en el parlamento, en las elecciones con más índice de participación de la historia democrática húngara.

martes, 19 de enero de 2021

Göran Olsson, "Preocupándonos por la violencia" [2014]


Es una mirada fragmentaria, sustentada en material de archivo de la televisión sueca, a algunos momentos de los procesos de descolonización de varias naciones africanas, principalmente las lusófonas, hilada por la vehemente fuerza de los textos de "Los condenados de la tierra" de Frantz Fanon, leídos por Lauryn Hill: un ataque furtivo del Movimiento Popular para la Liberación de Angola en la provincia de Cabinda, la huelga en 1966 de los trabajadores de la corporación minera LAMCO en la ciudad liberiana de Nimba, la entusiasta participación de las mujeres en el Frente de Liberación de Mozambique, las bajas de las tropas portuguesas en una refriega en Guinea-Bissau, un extracto de una audaz entrevista al líder revolucionario burkinés Thomas Sankara o las imágenes del también posteriormente ejecutado líder guineano Amílcar Cabral. El documental funciona como una exégesis visual del libro del escritor martiniqués.

"La zona habitada por los colonizados no es complementaria de la zona habitada por los colonos. Esas dos zonas se oponen, pero no al servicio de una unidad superior. Regidas por una lógica puramente aristotélica, obedecen al principio de exclusión recíproca: no hay conciliación posible, uno de los términos sobra. La ciudad del colono es una ciudad dura, toda de piedra y hierro. Es una ciudad iluminada, asfaltada, donde los cubos de basura están siempre llenos de restos desconocidos, nunca vistos, ni siquiera soñados. Los pies del colono no se ven nunca, salvo quizá en el mar, pero jamás se está muy cerca de ellos. Pies protegidos por zapatos fuertes, mientras las calles de su ciudad son limpias, lisas, sin hoyos, sin piedras. La ciudad del colono es una ciudad harta, perezosa, su vientre está lleno de cosas buenas permanentemente. La ciudad del colono es una ciudad de blancos, de extranjeros. La ciudad del colonizado, o al menos la ciudad indígena, la ciudad negra, la 'medina' o barrio árabe, la reserva es un lugar de mala fama, poblado por hombres de mala fama, allí se nace en cualquier parte, de cualquier manera. Se muere en cualquier parte, de cualquier cosa. Es un mundo sin intervalos, los hombres están unos sobre otros, las casuchas unas sobre otras. La ciudad del colonizado es una ciudad hambrienta, hambrienta de pan, de carne, de zapatos, de carbón, de luz. La ciudad del colonizado es una ciudad agachada, una ciudad de rodillas, una ciudad revolcada en el fango. Es una ciudad de negros, una ciudad de boicots. La mirada que el colonizado lanza sobre la ciudad del colono es una mirada de lujuria, una mirada de deseo. Sueños de posesión. Todos los modos de posesión: sentarse a la mesa del colono, acostarse en la cama del colono, si es posible con su mujer. El colonizado es un envidioso. El colono no lo ignora cuando, sorprendiendo su mirada a la deriva, comprueba amargamente, pero siempre alerta: 'Quieren ocupar nuestro lugar.' Es verdad, no hay un colonizado que no sueñe cuando menos una vez al día en instalarse en el lugar del colono."

(Frantz Fanon, "Los condenados de la tierra", 1961.)

jueves, 14 de enero de 2021

Meléndez Valdés, "Discursos forenses" II [1802]

La mayoría de los escritores ilustrados patrios promovieron con sus plumas la cruzada contra las huestes mendicantes que merodeaban por el ruedo ibérico en el siglo XVIII: Feijóo, Forner, Jovellanos, Meléndez Valdés. La vagancia era una rémora para la construcción del Estado absolutista dieciochesco, una lacra para el desarrollo de la economía política y por tanto para el progreso de la felicidad común; el nomadismo pordiosero era el origen de toda la depravación moral y frecuentemente conducía al crimen y al engaño como forma de vida. Urgía que el Estado corrigiera la nociva ociosidad de los mendigos profesionales. El discurso forense de Meléndez Valdés se sitúa en el albor del siglo XIX, tiene por título "Fragmentos de un discurso sobre la mendiguez" y fue "Dirigido a un Ministro en el año de 1802 desde la ciudad de Zamora, con ocasión de darle gracias por haber conseguido de él una orden para que fueran admitidos en aquel Hospicio diez niños desvalidos que había recogido el autor". En él, además de agradecer al ministro Godoy la reclusión de los niños, Meléndez Valdés pretendía resaltar la importancia social de semejante acción: los hospicios generales, lejos de la mera labor caritativa, tenían que orientarse hacia la educación y el aprendizaje de un oficio, estaban llamados a convertirse en central institución de conversión de pordioseros en vasallos laboriosos, disciplinados y virtuosos. Así retrataba el escritor extremeño la peligrosa corrupción de los mendigos vocacionales, 


"No pueden concebirse por un alma honesta, ni por más que se diga ponderarse bien el envilecimiento, la torpe corrupción, el olvido de todos los deberes, el embrutecimiento en fin en que esta clase de hombres vive generalmente. Sin patria, sin residencia fija, sin consideración ni miramiento alguno, sin freno de ninguna autoridad, mudando de domicilio según su antojo, y en la más completa libertad, o más bien insubordinación e independencia, ni son vecinos de pueblo alguno, ni súbditos de ninguna autoridad, ni profesan la religión sino en el nombre, ni conocen párroco propio que los instruya en ella, ni nunca en fin se los verá en un templo oyendo una misa, ni en una devoción. Su vida miserable y vaga los exime de todo. Dados al vino y a un asqueroso desaseo, y durmiendo en pajares y cuadras mezclados y revueltos unos con otros, no conocen la honestidad ni la decencia, y borradas del todo las santas impresiones del pudor, se dan sin reparo a los desórdenes más feos. De este estado de entera independencia y envilecimiento nacen precisamente la degradación de alma, y el abandono brutal con que se entregan a todos los vicios. De la mendiguez a la ratería y el robo no hay sino un paso, y otro del robo hasta el suplicio: ¿y cuántos no han parado en él o en los presidios que tuvieron su aprendizaje de mendigos? Los hijos toman de los padres esta vida corrompida y libre, y con ella la inmoralidad y la mentira. Y además de muchos inocentes a quienes la horfandad o la miseria arrastra o fija en ella, el empleo de los primeros contagia y precipita al pueblo, por sí mismo incapaz de ver su infeliz paradero, y que sin un freno poderoso será en muy pocos años un pueblo de pordioseros y vagabundos. De aquí el envilecimiento y deshonor de la nación, y su despoblación y su pobreza. Y ciertamente ¿qué deberá pensarse de nosotros al verse por todas partes estas cuadrillas de vagos andrajosos, que con sus alaridos, su palidez, sus importunidades nos persiguen sin cesar, golpean continuamente nuestros cerrojos, y en ninguna parte nos dejan respirar? ¿quién no tachará de insuficientes nuestra policía y nuestras leyes, que ven este mal y olvidan remediarlo, o por su debilidad no lo pueden hacer? ¿a quién no chocará el contraste monstruoso entre tanta lacería y nuestro carácter benéfico y pundonoroso, nuestra caridad y tanta desnudez? ¿O quién no creerá ver sobre un mismo suelo dos diferentes pueblos, uno de ciudadanos, y otro de siervos degradados? ¿quién en fin no se avergonzaría de tener en su casa, de ver en ella a todas horas un solo ser tan miserable? su presencia bastaría a dar a todos una tan infeliz cuan justa idea de ningún decoro, errada economía y degradación de carácter y sentimientos del primero, por más lucido y decente que se le viese. Lo mismo pues deberá pensarse de la gran familia, si prontamente no se remedia este gravísimo desorden: el interés y el honor nacional clamarán sin cesar por tan saludable providencia."

(Juan Meléndez Valdés, ""Fragmentos de un discurso sobre la mendiguez. Dirigido a un Ministro en el año de 1802 desde la ciudad de Zamora, con ocasión de darle gracias por haber conseguido de él una orden para que fueran admitidos en aquel Hospicio diez niños desvalidos que había recogido el autor", 1802.)

miércoles, 13 de enero de 2021

Benito Jerónimo Feijoo, "Mapa intelectual y cotejo de Naciones" [1728]


El optimismo del pensamiento ilustrado del padre Feijóo:
la afirmación de la superioridad de unas naciones sobre otras, turbia pasión raíz de la turbia pasión nacionalista y de la política exterior agresiva, carece de sentido; la pluralidad de naciones solidarias en condiciones favorables podrá alzarse a un mismo nivel científico-técnico y desarrollar las aptitudes de la igual naturaleza humana articulándose en comunidad internacional que reclama idénticos derechos para todos los hombres y mujeres.

"31. Apenas, pues, hay gente alguna que examinado su fondo, pueda con justicia ser capitulada de bárbara. No negaré por tanto que no haya entre determinadas Naciones alguna desigualdad en orden al uso del discurso. Sé que este depende de la disposición del órgano, y en la disposición del órgano puede tener su influjo el clima en que se nace. Pero si se me pregunta qué Naciones son las más agudas, responderé, confesando con ingenuidad, que no puedo hacer juicio seguro. Veo que las Ciencias florecieron un tiempo entre los Fenices, otro entre los Griegos, otro entre los Romanos, otro entre los Arabes. Después se extendieron a casi todos los Europeos. Entre tanto que a cada tierra no le tocaba el turno de la circulación, eran tenidos los habitadores de ella por rudos. Después se vió que no entendían, ni adelantaban menos que los que tuvieron la dicha de ser los primeros. Acaso si el mundo dura mucho, y hay grandes revoluciones de Imperios (porque Minerva anda peregrina por la tierra, según el impulso que le dan las violentas agitaciones de Marte), poseerán las Ciencias en grado eminente los Iroqueses, los Lapones, los Trogloditas, los Garamantes, y otras gentes, a quienes hoy con desdén, y repugnancia admitimos por miembros de nuestra especie; de modo, que por la experiencia apenas podemos notar desigualdad de ingenio en las Naciones."

(Benito Jerónimo Feijoo, "Mapa intelectual y cotejo de Naciones", tomo II, discurso XV del "Teatro crítico universal", 1728.)

Jafar Panahi, "Taxi Teherán" [2015]


A Teherán, capital de una de las naciones del eje del mal. A transitarlo en taxi, teniendo como conductor a Jafar Panahi, un director vetado en su patria al que han prohibido abandonar el país; a Teherán a escuchar las historias de los pasajeros que el entrañable Jafar va recogiendo en el trayecto. 'Realismo Sórdido': los robos, la opresión de la mujer, la crueldad de la sharia, la estúpida censura, el adoctrinamiento escolar, o los contrabandistas de mercancías culturales realizadas en occidente.

domingo, 10 de enero de 2021

Las Chicos de Gràcia, "Besos al Besós. Crónica de una lucha anunciada" [1990]


Sant Adriá del Besós, migrantes del sur, antiguos barraquistas del Somorrostro y Montjüic. Cobasa, barrio obrero, memoria de la épica proletaria, la vida también bulle en los grises polígonos de vivienda de la periferia programados para dormir y follar. En las postimetrías de las Olimpiadas del '92 los diseñadores urbanos planifican la reordenación metropolitana del margen derecho del Besós, que contempla el desmantelamiento del barrio de La Mina, área quinqui, contenedor de vicio y delincuencia, depósito de desechos, estorbo a erradicar. Revalorización del territorio, intervencionismo urbano, los promotores inmobiliarios babean pensando en los réditos que ofrecerá el acondicionamiento del puerto recreativo, o en el nauseabundo paseo que dará la gente guapa por otro centro comercial. ¿En dónde realojar a los bárbaros residentes de La Mina?. Kinkis contra Chonis, excluidos contra explotados, clases peligrosas contra clases labioriosas, el barrio lumpen marginal contra el cinturón rojo suburbial, La Mina contra Cobasa, 'si eres un explotado alégrate, porque lo que acecha es la exclusión social', y 'vosotros, que os oponéis a este lustroso plan de reestructuración urbana, no queréis convivir con drogatas y gitanos, sois unos racistas'. Y maldita sea la clase media, y la mediocridad del espectáculo que la consume. Y hace unos octubres hacían veinticinco años de aquella Intifada del Besós, sublime explosión de rabia urbana, 'viviendas no, equipamientos sí', cuando la policía tomaba el solar de La Palmera, los habitantes atacaban pertrechados de las clásicas armas de los revoltosos callejeros para desalojar al imponente intruso, y las vecinas arrojaban los electrodomésticos por las ventanas, el ominoso actuar policial intensificaba su riesgo. '¿Quién fue aquel chaval de vanguardia que portaba como escudo un contenedor?', '¿estabas aquella mañana en que se cortó la autopista y los gossos atacaron con todo su arsenal?', '¿quién arrojaría aquel frigorífico que estaba estampado en el suelo?', '¿se os ocurre genialidad mayor que deshaceros de vuestros televisores lanzándolos por la ventana defendiendo el territorio de una extraña presencial policial?'. Una Vieja Conclusión: MANTÉN EL PESIMISMO ACTIVO

sábado, 9 de enero de 2021

Falconetti Peña, "El Forat (el agujero)" [2004]


Higienización de Ciutat Vella. ¿Quién arrancó El Abeto? Era el símbolo de la resistencia vecinal del barrio de la Ribera contra el proceso de transformación urbana del casco antiguo de Barcelona, allí en el Forat de la Vergonya, la plaza Mayor del barrio. Lo añoro cuando paseo por allí, ahora que un parque acorde a las prescripciones de lo que es un espacio público de calidad ocupa el lugar, ¿no será la premisa mayor de este tipo de espacios la voluntad de ahuyentar a aquellos para los que están planificados? Al menos no es un horrendo párking destinado al estacionamiento de los vehículos de los mirones urbanicidas. En los aledaños, desechables comercios para ricos, lofts para lameculos exitosos, apartamentos para turistas degenerados, y en los bares, incluso en aquellos que no son de inhóspito diseño, aplicados estudiantes charlan de las penosas exigencias que les impone un profesorado demente. Y es otra muestra del todopoderoso dominio de la mediocridad de la clase media, un fantasma impera Europa, tan conocida y detestada, ¿en qué familia tipo creen que fui criado?, en otra de aquellas que lega la atracción por una moderación canalla, que transfiere el aprecio a unas vacuas celebraciones multiculturales, que aviva la curiosidad por una inocua venerabilidad histórica. Y si sigo caminando la ciudad, es también por recoger pedazos de historias de vidas irredentas, por buscar rastros de pasiones silenciadas, por captar la energía histórica esbozada en los sucesos desobedientes pasados, por fantasear con cómo pudo ser la extensión de esa lucha perdida, que como mancha de aceite, como alzamiento de lo viviente en el juego de la historia, se convirtiera en el movimiento que disuelve toda separación. Que los anales de la ucronía queden al menos como entretenida compensación.

miércoles, 6 de enero de 2021

Ellen Fiske y Ellinor Hallin, "Pájaros sin alas" [2018]


Motherwell es una localidad cercana a Glasgow conocida como 'Steelopolis', antaño capital de la producción del acero en Escocia. Hoy, tras la desindustrialización auspiciada por el thatcherismo, la población habita los polígonos de vivienda social y sobrevive de las prestaciones estatales mientras mayormente ocupa su tiempo consumiendo drogas, peleándose entre pandillas o cometiendo delitos menores. Carnaza 'chav', una invisible losa tiraniza la posibilidad de disfrutar otra vida, como si aun teniendo la supervivencia garantizada no fuera posible regocijarse en la pereza sin culpa.

"La demonización de la clase trabajadora es el conquistador que se burla del conquistado. Durante los últimos treinta años, se ha dejado a los trabajadores sin poder en el lugar de trabajo, en los medios de comunicación, en la clase política y en la sociedad en su conjunto. Las élites dirigentes en otro tiempo temblaban ante el ruido de botas de clase trabajadora marchando hacie Downing Street y una masa resuelta con banderas rojas y ejemplares sobados de "El manifiesto comunista". Allá por los años setenta, los derechistas solían quejarse de que los sindicatos eran el verdadero poder del país. Por surrealista que parezca ahora, era la 'fuerza' de la clase trabajadora lo que se despreciaba y ridiculizaba. Pero hoy, con su poder hecho añicos, se puede insultar impunemente a la clase trabajadora llamándoles borrachos, haraganes y chandaleros que sienten debilidad por Enoch Powell. Flojos, responsables y brutos, quizá, pero desde luego no peligrosos."

(Owen Jones, "Chavs. La demonización de la clase obrera", 2011.)

viernes, 1 de enero de 2021

Jan Svankmajer, "Lunacy" [2005]


Nuestro gran manicomio ¿cómo compagina la libertad nihilista mercantil con la dirección cohesionada de la sociedad? ¿Cómo armoniza el hedonismo de masas y la disciplina restrictiva del deber? ¿Cómo consigue encorsetar la satisfacción individual en la organización comunitaria? ¿Qué seducciones despliega y qué atracciones condena, qué deseos colma y qué desviaciones castiga, qué habilidades recompensa y qué conductas persigue, que pensamientos elogia y qué ideas deplora? ¿Y cómo readapta las disfunciones, cómo reconduce las interrupciones, cómo normaliza las rarezas, cómo solventa sus problemas?
"La película propone, en esencia, un debate ideológico sobre la gestión de un manicomio. En principio, hay dos maneras de hacerlo – ambas son igualmente extremas. Una alienta la libertad absoluta; la otra, el método obsoleto de vigilar y castigar. Pero hay un tercer método que combina y resume los peores aspectos de los dos primeros. Es el manicomio en el que todos vivimos hoy”.
En una entrevista incluida del volumen recopilatorio editado por Pepitas de Calabaza, "Para ver, cierra los ojos", intrigado el entrevistador por las alusiones de la película a la Revolución Francesa, le pregunta si las referencias son un 'comentario pesimista sobre las perspectivas de la revolución', contestando Svankmajer, 
"Sí. Creo que la revolución no soluciona los problemas de la civilización. No obstante, eso no significa que uno no deba rebelarse o impulsar una revolución. Creo que los periodos más felices de la humanidad los encontramos en los periodos en los que la represión vigente comienza a perder sus poderes como consecuencia de la presión revolucionaria y la nueva represión, que se llevará a cabo con el poder -sea como resultado de una victoria de la revolución o de la contrarrevolución- no ha empezado su tarea. Semejante 'caos anarquista' es un agujero negro de libertad. Esto fue por ejemplo, la segunda mitad de los años sesenta en Checoslovaquia."