La gran gesta constructora del comunismo, exige que los sentimientos individuales, incluido el noble deseo de venganza, acicate de una temeridad que forja héroes, queden relegados a las exigencias estratégicas del Partido. Y este es básicamente el arduo aprendizaje: acoplar las mociones individuales a la disciplina de la organización colectiva. Porque cada proletaria lleva las lágrimas en su corazón, ¿pero podría resolver algo que hiciera lo que le viniera en gana?
jueves, 3 de octubre de 2019
Xie Jin, "El destacamento rojo de mujeres" [1961]
La gran gesta constructora del comunismo, exige que los sentimientos individuales, incluido el noble deseo de venganza, acicate de una temeridad que forja héroes, queden relegados a las exigencias estratégicas del Partido. Y este es básicamente el arduo aprendizaje: acoplar las mociones individuales a la disciplina de la organización colectiva. Porque cada proletaria lleva las lágrimas en su corazón, ¿pero podría resolver algo que hiciera lo que le viniera en gana?
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